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COSEJOS VISUALESPARA UN USO RESPONSABLE DE LOS DISPOSITIVOS CON PANTALLASDIGITALES

Guillermo Ayala García
Optometrista
Opticlinic-Oftalmoclinic

Cada vez son más los niños y adolescentes que reciben como regalos productos tecnológicos como teléfonos móviles, tabletas o videoconsolas. Este tipo de dispositivos ha experimentado un espectacular aumento en los últimos años, y en cada hogar existen ya un gran número de ellos.

Utilizar estas nuevas tecnologías puede llegar a mejorar el rendimiento en determinadas tareas (como en la coordinación ojo-mano, el tiempo de reacción, identificación de objetos en movimiento, etc.) siempre y cuando se realice de forma moderada. Sin embargo, su uso abusivo está asociado a problemas que también se pueden manifestar a nivel ocular y visual.

Uno de estos inconvenientes puede ser la conocida como “fatiga visual”, esta aparece cuando comenzamos a notar leves cefaleas, irritación o enrojecimiento ocular, ardor, sequedad, picor, migrañas o cansancio ocular tras varias horas seguidas fijando nuestra visión en televisiones, monitores o pantallas de este tipo.

En este sentido, te ofrecemos a continuación una serie consejos muy útiles a poner en práctica, con el objetivo de evitar o reducir la aparición de daños y molestias en la visión al utilizar dispositivos electrónicos de manera continua:

  • Ajusta el contraste y la luz de la pantalla a un nivel adecuado sin que el brillo sea excesivo ni insuficiente.
    • Mantén siempre una adecuada iluminación general de la habitación, y no a oscuras. Y, en caso de que no haya iluminación natural, procura que la artificial no sea muy intensa ni provoque sombras molestas.
  • Coloca el dispositivo o pantallas de forma que evite el reflejo de luces directas y, preferiblemente, a una altura un poco más baja que la de los ojos.
  • Revisa la distancia existente entre los ojos y la pantalla. Una distancia muy corta obliga al sistema visual a realizar un excesivo esfuerzo acomodativo. Por ello, se recomienda una distancia mínima equivalente a la medida desde el codo hasta los dedos para los teléfonos y tabletas, por su parte, del hombro hasta los dedos para las pantallas convencionales de sobremesa.
  • Para evitar los síntomas del ojo seco es fundamental parpadear de manera frecuente. Además, procura que la pantalla del dispositivo se encuentre siempre limpia, sin huellas ni suciedad, para optimizar el esfuerzo al enfocar.
  • En el caso de leer libros electrónicos, es recomendable hacerlo en dispositivos con tinta electrónica (e-ink) como eBooks, antes de hacerlo en tabletas, móviles o pantallas digitales. Estos dispositivos no emiten luz, sino que refleja la que hay en el ambiente, como si fuese un papel convencional. Esto hace que la experiencia del usuario sea casi la misma que si leyese desde un libro normal.
  • Realiza descansos periódicos y limita el tiempo total. El control del horario de uso es fundamental. Deja de mirar las pantallas y dispositivos un rato corto cada media hora aproximadamente y fija la mirada en objetos que estén más lejanos para evitar cansancio, fatiga visual, picor, escozor e, incluso, dolores de cabeza.

¡Recuerda! Además de seguir estos consejos, acude a las revisiones con tu optometrista al menos una vez al año para que este profesional sanitario de la visión pueda realizar una evaluación de tu visión y recomendarte las mejores soluciones para compensar tus problemas visuales.

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ESTRABISMO (PARTE 2)

Escrito por:
Optometrista Guillermo Ayala

Síntomas del estrabismo


• Visuales: Visión doble, visión borrosa, fatiga ocular, mayor sensibilidad a la luz.
Estéticos: Alineación incorrecta de uno o ambos ojos. El problema estético debe tratarse una vez solucionado el problema visual ya que la corrección estética no tiene un plazo para llevarse a cabo, incluso puede realizarse en la edad adulta.

¿Cómo se diagnostica?


El diagnóstico del estrabismo se realiza mediante un examen oftalmológico. Cualquier niño mayor de 4 meses cuyos ojos no estén alineados durante todo el tiempo debe ser examinado por el oftalmólogo. Si el problema es muy evidente, debe ser examinado antes de los 4 meses. Además, los pediatras deben revisar la visión en todos los niños en torno a los 3 años y ante cualquier anomalía deben ser remitidos al oftalmólogo.

Tratamiento del estrabismo


El objetivo del tratamiento del estrabismo es fortalecer los músculos de los ojos y restablecer la visión binocular (por los dos ojos). El tratamiento varía en función del origen del estrabismo, de la edad del paciente y de la evolución. En ocasiones se corrige con gafas que, además corrigen la ambliopía o la hipermetropía subyacentes. Los ejercicios oculares pueden ser útiles.

Estrabismos convergentes

Los estrabismos convergentes suelen asociarse con hipermetropía (hipermetropía estrábica). Por este motivo, lo primero que se debe hacer con un niño con sospecha de estrabismo es graduarle para saber si es hipermétrope. Si se confirma la hipermetropía se deben prescribir unas gafas y observar si la desviación se corrige con las mismas. Si el niño no desvía el ojo con las gafas puestas, no debe ser operado y debe ser tratado únicamente con las gafas. Esto es difícil de entender para los padres, ya que al quitarse las gafas el niño sigue desviando el ojo. Sin embargo, la hipermetropía tiende a disminuir con la edad y, si llega a desaparecer, el niño podrá estar sin gafas y sin desviar el ojo ya que su estrabismo era totalmente dependiente de la hipermetropía. Si estos niños son operados tienen mayor tendencia a desarrollar un estrabismo divergente con la edad.

Ojo vago

Cuando como consecuencia del estrabismo se produce un ojo vago o, lo que es lo mismo, ambliopía (ambliopía estrábica), el tratamiento consiste en ocluir, es decir tapar con parches, el ojo bueno para fortalecer y mejorar la visión del ojo desviado. La oclusión solo corrige el problema visual y no disminuye la desviación estética. En general, cuanto antes se trate le ambliopía, mejor será la visión posterior.

Corrección estética de la desviación


Esta puede tratarse mediante la inyección de toxina botulínica o mediante cirugía para reforzar y/o debilitar los músculos encargados de la movilidad del ojo. En general se utiliza la toxina botulínica en estrabismos convergentes por debajo de los 4 años, con desviaciones no muy grandes y sin componente vertical asociado. En el resto de los casos la opción es la cirugía. La gran mayoría de los estrabismos de adultos se operan con fines estéticos.

En la cirugía del estrabismo, el cirujano despega y recoloca los músculos dependiendo de la dirección de desviación. La recuperación es rápida y los niños pueden retomar su actividad habitual en pocos días. Tras la cirugía se pueden seguir necesitando las gafas y en ocasiones puede necesitarse más de una cirugía para fortalecer los ojos.